10 junio, 2021 – EL ESPAÑOL
Compromís negocia una prórroga urbanística para el dueño del Valencia CF, que opera desde Hong Kong, mientras excluye a firmas de estas naciones.
El Gobierno valenciano, y en particular las áreas controladas por Compromís, incurren en una profunda contradicción en su veto a las empresas «que operan en paraísos fiscales». La vicepresidenta autonómica y líder de la formación, Mónica Oltra, anunció esta semana la exclusión en sus contratos de las firmas con sede en estos territorios. Todo mientras el mismo partido -contra la voluntad de sus socios socialistas- negocia una ventajosa prórroga urbanística para el Valencia CF, cuyo máximo accionista opera desde Hong Kong a través de la firma Meriton Holdings Ltd.
El anuncio realizado el lunes por la dirigente endurece de forma significativa la legislación existente en la autonomía. Su departamento, el de Igualdad, introducirá en los pliegos para la licitación de residencias públicas de mayores una «condición de especial ejecución». Exigirá a las empresas comunicar todo el dinero recibido de la Generalitat Valenciana en sus declaraciones de IRPF o Impuesto de Sociedades, según el caso. También que no lo destinen «a la realización de operaciones en paraísos fiscales con la finalidad de obtener un ahorro fiscal».
Oltra comunicó esta medida tras reunirse con Intermón Oxfam, a quien agradeció el protocolo ideado para vetar a este tipo de firmas en la contratación pública. Y se da la circunstancia de que la propia ONG incluye a Hong Kong entre los territorios que cataloga como paraísos fiscales. Allí tiene la sede social la empresa que posee la mayoría accionarial del Valencia CF, Meriton Holdings -tal y como advirtió este martes el portavoz de la plataforma Marea Valencianista, Miguel Zorío-.
El trato con la administración que persigue Peter Lim es una prórroga de la Actuación Territorial Estratégica (ATE) para el traslado del viejo al nuevo Mestalla. Se trata de una ventajosa recalificación impulsada por el PP mediante la que el club logró más edificabilidad en la parcela de su actual estadio y más tiempo para acometer el traslado al nuevo coliseo, construido sobre un suelo de origen público.
Se trata de ventajosas condiciones, impensables para el ciudadano de a pie. Por contra, el club no las ha aprovechado. Las obras del nuevo estadio llevan 11 años paradas, y Peter Lim no ha movido un ladrillo desde su llegada al club en 2014. El dirigente ha incumplido todos y cada uno de los compromisos urbanísticos adquiridos con la administración pública.
Rechazo socialista
Es por ello que la Conselleria de Obras Públicas de Arcadi España (PSPV-PSOE), y la también socialista Sandra Gómez (vicealcaldesa de Valencia) dan por incumplida la ATE y apuestan por declinar la prórroga que solicita Lim. Pero el empresario de Singapur ha encontrado en Compromís un aliado inesperado.
Además de Oltra, la Conslleria de Economía, que es quien ha de firmar la prórroga de la ATE, se ha mostrado partidaria de atender la petición del club. También se han significado en esta línea el alcalde de Valencia, Joan Ribó, y el presidente de Les Corts Valencianes, Enric Morera. Todos ellos militan en Compromís.
Si Peter Lim logra la prórroga que busca afrontará un escenario económico en el Valencia CF mucho más favorable al del supuesto contrario. La anulación de la ATE supondría un duro golpe para las cuentas del magnate singapurense, pues el terreno del viejo Mestalla pasaría a valer mucho menos y el nuevo estadio debería ser derribado.
En el caso de que el empresario logre la prórroga, cabe preguntarse si Compromís mostrará el mismo celo que con las residencias de mayores y exigirá al empresario que se comprometa a no redirigir a Hong Kong ninguno de los beneficios que pudieran resultar del favor urbanístico de la administración.
Ante tal disyuntiva, el portavoz de Marea Valencianista y exvicepresidente del Valencia CF solicita «que los responsables políticos valencianos sean consecuentes a la hora de hacer cumplir los compromisos de la ATE a Lim y a Meriton».»Lim tiene muchas de sus empresas en paraísos fiscales, y se hizo hipermillonario con otras utilizando mano de obra infantil, como es el caso de Wilmar Itl., la empresa de aceite de palma», subraya Zorío.